La mañana en Dublín cundió bastante al menos fotográficamente hablando ya que di unos cuantos disparos certeros ese día. Esta es la tercera y última fotografía de la prisión. Una vista general de lo que se podía contemplar desde fuera.
Aunque la fotografía se realizó en color, la ocasión merecía una tonalidad más clásica en honor a la vejez de la construcción. La luminosidad ha sido altamente modificada sobre todo en los extremos para acentuar más aún la sensación de profundidad. La llamativa perspectiva de gran angular se ha conseguido ensamblando cinco fotografías diferentes. De ahí su formato extrapanorámico.
Aunque la fotografía se realizó en color, la ocasión merecía una tonalidad más clásica en honor a la vejez de la construcción. La luminosidad ha sido altamente modificada sobre todo en los extremos para acentuar más aún la sensación de profundidad. La llamativa perspectiva de gran angular se ha conseguido ensamblando cinco fotografías diferentes. De ahí su formato extrapanorámico.
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